sábado, 1 de marzo de 2014

Brevet 200 Cartagena

Tras casi tres años de ausencia bloguera y en un período de letargo deportivo, donde no es que haya estado parado, ni mucho menos, pero si que me he movido un poco por sensaciones, sin tomármelo como una obligación, aunque hemos hecho cosicas interesantes como sacarme la espina, al cuarto intento, con la Larra-Larrau en un viaje mano a mano con Joaquín y tras un entrenamiento relámpago en 2 meses logré sacarme punta y bajar con holgura de las 6 horas (5h51). También hemos vuelto a retomar el contacto con la mtb, con rutillas duras y largas y poniéndome el dorsal de vez en cuando en alguna maratón.
Retomo el blog con el objetivo de contar el camino que ojalá nos lleve a ponernos en la línea de salida de la París-Brest-París el año próximo, con ánimos renovados y con una periodicidad distinta, mi intención es sólo hacer entradas de eventos o salidas relevantes, como mucho una vez a la semana. Así que, empezamos...

* 210 kms en 7h37 (27,5 kms/h) @ .... sin pulsómetro

Nos presentábamos en la salida Gregorio, Domi, Chente y yo, todos neófitos en estos asuntos breveteros, con la intención de echar una buena mañana y con algunas dudas, ya que no teníamos ni idea de cuanta gente estaría en la salida ni del ritmo y mecánica exacta de estos eventos. 
Nos hemos dado cita 18 ciclistas y, la verdad, ha estado muy bien, rodando todo el día juntos y a buen ritmo, con algunos piques para romper el hielo en el Lomo de Bas, Castillo de Lorca y en la Pinilla, donde si bien no nos hemos llegado a poner a tope, han servido para medir las fuerzas de cada uno y ver por donde daba el aire jejejej.

(Perfil y mapas de brevetscartagena.blogspot.com)

El recorrido, a mi particularmente, me ha gustado mucho,
aunque probablemente sea porque hecho a rodar siempre por el interior, es ver algo de costa o ir pegado a la playa y... bueno a todos nos gusta romper con la monotonía, aunque nos haya tocado pagar como tributo por ir costeando el tener que aguantar un duro, a ratos durísimo, viento de cara hasta que hemos girado al interior, especialmente subiendo el alto de Pulpí, donde daba de cara en plan galáctico por una carretera anchísima. Sin duda los momentos más feos del día.


Una vez dejado atrás Pulpí y almorzado en Pozo Higuera (me quito el sombrero ante la curradísima organización) hemos ido encontrando viento favorable, lo que ha hecho que la gente se fuese animando y rodando cada vez más rápido. Me descuelgo un poco antes de Lorca para esperar a Domi por un error, ya que pensaba que no llevaba el track y volvemos a enganchar al comenzar el Castillo de Lorca.
De Lorca hasta La Aljorra se ha volado, con una media que habrá estado por encima de los 35 kms/h con holgura, llegando a meta sólo con un poco de retraso sobre el horario que tenía en mente y evitando, por poco, un chaparrón por el Campo de Cartagena para acabar la jornada.


A mi, y creo que a los cuatro, me ha gustado mucho la experiencia, tanto por ritmo, compañía, recorrido, organización... a ver que pasa en el 300, donde ya se pondrá la cosa interesante.

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